Quién tenga experiencia internacional sabrá perfectamente acerca de lo que hablamos en el siguiente artículo, las personas con las que se relacionan en el extranjero impactan e influyen en nuestros hijos, más de lo que podemos imaginar.
Todas las relaciones afectivas y/o amistosas que forjen en el extranjero repercutirán en sus experiencias en el futuro, ya que el acompañamiento será recíproco. Serán los mutuos pilares de apoyo debido a la igualdad de condiciones en las que ambas partes estarán; lejos de casa, en el mismo barco experiencial y solos.
Crean lazos
Como ya lo mencionamos, ambas partes se unirán al sentir las mismas cosas: estarán fuera de su zona de confort, lejos de casa y básicamente solos. En el momento en el que conocen personas, empatan en gustos y congenian, por lo que en automático se aferrarán a ellos, será como que tengan familia en el extranjero.
La tendencia en los lazos que forjen bajo experiencias internacionales llegarán a ser de mayor peso debido a la intensidad de carga emocional y el sube y baja de emocional que les puede causar el estar fuera de su zona de confort; esto hará que normalmente las relaciones se vuelvan más puras, nuevas entre desconocidos y sin otras personas o influencias de por medio. Todo esto les llevará a mostrarnos más vulnerables, y esta es una gran forma para formar un lazo de gran confianza.
Se dice que la familia no es solo la de sangre. En estos campamentos de verano en el extranjero se selecciona una familia que será “su familia” durante las 3 o 4 semanas que dura el campamento de verano. Tus hijos tendrán que experimentar y relacionarse con ellos, salirse de su zona de confort y crear unos nuevos lazos familiares que le dará más confianza y personalidad. Además de que esta familia será su lugar de confort durante sus días en el extranjero.
Abren la mente
El hecho de que se relacionen internacionalmente es una de las mejores y más eficientes formas para que hagan consciente la interculturalidad, ya que mientras más tiempo pasan con otras personas de distintas nacionalidades, más abren los ojos a las diferencias y variaciones culturales alrededor del mundo. Cada uno procede de distintos lugares del mundo, distintos países, donde hacer cosas incluso cotidianas son muy distintas, esto les ayudará a ser más tolerantes, al ver que no todo es blanco o negro, si no también puede ser gris, incluso con matices, por lo que romperán prejuicios y barreras.
Mientras más conozcan el mundo, más lo respetarán y esto les llevará a construir una sociedad más homogénea, tolerante e inclusiva. Cuando viajan a estudiar un curso de inglés en el extranjero son más propensos a que se den cuenta que el mundo realmente no es como lo pintan las redes sociales, las películas, los buscadores de internet, conocidos que hayan viajado ya a otros países, y que no siempre saben todo acerca de un país o alguna cultura. De esta forma pueden derribar paradigmas y mitos sobre distintos países, conocer culturas, religiones y sus diferencias, aportando conocimiento, nutriendo su mente para vivir en armonía tanto con ellos mismo, como con los que los rodearán.
Crean experiencias invaluables
Colectan vivencias geniales, fuera de su zona de confort. El campamento de verano en el extranjero les servirá como trampolín para experimentar cosas únicas y nuevas. Por ejemplo, alguien de España puede preparar comida típica como una paella valencia, alguien de Japón les puede enseñar sobre esa cultura milenaria, ellos de México preparan chiles en nogada o enseñan acerca del día de muertos, mientras que su amigo de Brasil les enseña sobre la capoeira, la de Canadá les invita a hacer ski en la nieve y quien es de Estados Unidos les invita a ver un partido de NFL. Esta es la riqueza cultural que compartirán durante sus 3 o 4 semanas en su campamento de verano en el extranjero.
Además, pueden aprender palabras en distintos idiomas, saludar, despedirse, dar las gracias y que de esta forma les es más fácil el comunicarse por todo el mundo. De hecho, la tarea no se les termina aquí, ya que también podría ser recíproco el conocimiento de palabras, enseñando su propia cultura, explicando y comentando acerca de su lugar de origen, sus monumentos históricos, sus sitios de interés, gastronomía, etc.
Comienzan una red internacional de contactos
Una de las cosas más importantes que les puede dejar un campamento de verano en el extranjero para el futuro, además de todo el bonche de buenos recuerdos y experiencias con sus amigos, es un gran directorio que armarán y renovarán con el pasar de los años. Tal y como mencionamos anteriormente, contarán con una familia elegida y repartida a lo largo del mundo, familia que, sin problema alguno, no dudará en dar hospedaje al momento de que ellos visiten sus países de origen de cada integrante. Además de esto, cuando visiten a los miembros, aprenderán acerca del lugar, ya que contarán con “guías turísticos” de confianza total y plena, por lo que formarán parte de esta comunidad.
La vida da muchas vueltas, hoy se están “aquí” y mañana se podrían estar “allá”, por lo que no se sabe si en algún futuro una amistad hecha en un campamento pueda ayudarles para empezar una carrera internacional, ayudándoles a conseguir alguna entrevista de trabajo o empezando algún negocio en conjunto.
En resumen, que hagan amigos internacionales en un campamento de verano en el extranjero les da pauta a un sin fin de posibilidades para su futuro, les ayuda a ampliar el panorama que tienen sobre el mundo, crean lazos fuertes y les amplía la red de contactos que tienen.
