A pesar de ser un destino pequeño y relativamente poco conocido, la isla de Malta es un gran sitio que ofrece una cultura y playas increíbles. Por lo que en este artículo contaremos qué se puede ver en Malta.
Paraísos secretos, ciudades, templos y más sitios top para visitar en Malta, un gran destino turístico, o bien para vivir, estudiar y/o trabajar en este país.
Malta es un archipiélago de tres islas: Malta (la más grande), Comino y Gozo. Las islas se encuentran entre la costa de Libia (al norte de África) y Sicilia (Italia). Una de las curiosidades de esta nación europea es que se habla inglés y maltés (que deriva del árabe).
Gozo
La segunda isla más grande del país, sus atractivos turísticos son sus ensenadas y cabos, así como sus pequeñas pero encantadoras ciudades.
En Victoria (que es la capital), no pueden faltar las escalas técnicas a la Catedral de Gozo, de estilo barroco y al Museo de Ciencias Naturales. Mientras que al este se encuentran los templos de Ggantija y la playa paradisíaca de San Blas.
Hacia el oeste se encuentran las grutas y acantilados, las cuales se pueden explorar. También está lo que queda del cabo Blue Window, que su estructura era parecida a una ventana en medio del mar, sin embargo en 2017 colapsó debido a un fuerte oleaje.
Comino
La isla más pequeña del archipiélago, a la cuál se puede acceder partiendo desde el acuario en un viaje de un poco más de una hora en coche, para concluir en ferry. Su gran atractivo son las aguas cristalinas de sus increíbles costas.
Destaca, entre las playas más famosas, Laguna Azul, localizada en la costa este, sin embargo, en verano está llena de turistas, por lo que es recomendable visitarla en primavera
Además, en el extremo opuesto de la isla se pueden encontrar las calas y la playa de Santa María.
La Valeta
Esta es la capital de la isla mayor. Aquí hay historia de hace más de 450 años en todas las calles de su puerto y centro histórico, por lo que forman parte del patrimonio de la humanidad.
El casco antiguo de La Valeta fue diseñado como una fortaleza por medio del arquitecto italiano Francesco Laparelli, quién fue alumno del maestro renacentista Miguel Ángel. Fue creada para defenderse de las invasiones por parte de los turcos en el siglo XVI.
En la entrada del puerto se ubica el fuerte de San Telmo, que es la huella más representativa del pasado militar maltés. Para más información sobre la historia bélica de la nación, se puede acceder al Museo Nacional de la Guerra.
Regresando al centro histórico, ahí se encuentra la puerta de la ciudad, el Palacio del Gran Maestre (central de la presidencia de Malta) y el Parlamento. Yacen de igual manera los Jardines de Barrakka, el Bastión de San Pedro y la Plaza de Jorge.
Y si se trata de añadir joyas a la corona maltesa del turismo, es importante enlistar la Catedral de San Juan, ya que en su interior se encuentra la obra maestra de Caravaggio (otro genio del renacentismo) “La Decapitación de San Juan Bautista”.
Por último, aquí la vida social es muy extensa, ya que se puede disfrutar de los planes nocturnos en los clubes y restaurantes del barrio Saint Julian’s. St. Georges Road, Dragonara Road, St. Rita Steps y Wilga Street son las calles de este barrio en las que se encuentra la mejor vida nocturna y restaurantes.
Hagar Qim y Mnajdra
Continuando por la costa, a nueve kilómetros se encuentra la más icónica reliquia construída en Malta, el templo de Hagar Qim, edificación que data de los años 3600 y 3200 a.C.
Antes de entrar al templo, un museo previo da una introducción sobre la historia del lugar. Sin embargo, ha durado más de un siglo la discusión y el debate entre arqueólogos que no se terminan de explicar cómo es que hombres de la edad de piedra lograron levantar muros de hasta 5 metros con 57 toneladas de peso.
A 500 metros del sitio, se encuentra una edificación de 3 templos a los que se les conoce como Mnajdra. Estos, de igual manera, datan de 3,000 años antes de nuestros tiempos.
Buskett y Dingli
Malta no es conocido por tener mucha naturaleza o zonas de campo, sin embargo, la más popular y grande es Buskett, a la cuál se puede acceder por carretera en 30 minutos partiendo desde Mdina.
Este es un bosque plantado por la Orden de Malta, perfecto para explorar la fauna que lo habita y hacer senderismo. Además, puede funcionar como un buen spot para tomarse un break o hacer un picnic.
Además, es sede del Palacio de Verdala, residencia de verano para el presidente de Malta. Al viajar en autobús hasta el lugar, este llegará antes a los Acantilados de Dingli (por la ruta que sigue), a 200 metros sobre el nivel del mar.
Al pasar de los siglos, la gran cantidad de cavernas funcionó como casa para pastores, punto de resguardo de rebaños e incluso como guarida de piratas. En la actualidad es un gran lugar para una vista increíble del Mediterráneo.
Gruta Azul
Porque Malta no es solo vestigios, reliquias e historia arquitectónica, también se puede disfrutar de una increíble experiencia en sus playas bajo el sol maltés. A dos kilómetros hacia el sur de Hagar Qim y Mnajdra yace Gruta Azul.
Seis cuevas marinas bajo los acantilados conforman esta maravilla natural. Como su nombre lo dice, esta desprende una gran paleta de tonos azules que es proyectada sobre las paredes gracias al reflejo del agua del Mediterráneo.
Se puede acceder a ellas una por una y mediante embarcaciones (con un costo de aproximadamente 8 euros por persona). Bucear, descubrir la diversidad de las aguas y refrescarse son las tareas predilectas de esta aventura.
Como dato, en esta misma cueva se grabó una de las escenas de “Troya”, filme protagonizado por Brad Pitt. Sin duda es un gran spot para presumir en redes sociales.
Mdina y Rabat
Son ciudades vecinas que se ubican a media hora de Valeta y estas mantienen grandes tesoros para ver en Malta. Además, son importantes centros de peregrinaje cristiano.
Mdina, es conocida por ser una ciudad reforzada y la anterior capital de la isla. Su arquitectura transporta a la edad media, el siglo Xll. A pesar de que existen huellas de existencia humana desde hace 4,000 años.
Los edificios que hay para destacar son los palacios medievales de Vilhena y Falson. De igual manera, la Catedral de San Pablo, del siglo XVll, que está adornada con cuadros de estilo barroco, los cuales relatan el naufragio del apóstol en Malta.
Esta parte es conocida como la “Ciudad del Silencio” ya que solo los autos locales pueden transitar por las estrechas calles hechas de piedra caliza.
Del centro de Mdina, a 900 metros, se encuentran las Catacumbas de San Pablo, en Rabat. Este lugar es de culto para los católicos ya que es el último lugar del apóstol después de huir de Israel en el siglo l.
Malta National Aquarium
Al norte de la isla se encuentra el Acuario Nacional, el cual es definitivamente una escala obligatoria, ya que es hogar de más de 200 especies marinas procedentes del agua cercana a la isla.
El tanque principal (que es el mayor atractivo) es un túnel que hace parecer que se camina por debajo del mar para observar una gran diversidad de peces que viven en un hábitat parecido a su origen.
Los horarios del acuario son de lunes a domingo de 10 a.m. a 6 p.m., con un costo de admisión de 13 euros por persona.
Hal Saflieni y Tarxien
La isla maltesa tiene apenas una superficie de 316 kilómetros cuadrados, incluso menor a Mónaco o el Vaticano, no obstante, desde tiempos remotos ha sido un lugar en el que el comercio y la estrategia militar siempre ha estado presente para distintas potencias marítimas de la zona.
La tierra maltesa ha sido testigo de culturas como la: griega, latina, árabe, italiana, francesa y británica. Por lo que las ruinas de los pueblos de la edad de piedra son sitios para conocer en Malta.
Partiendo de la capital, a 15 minutos en coche o autobús, se encuentra el Hipogeo de Hal Saflieni. Un edificio que es un gran representante de la arquitectura maltesa. Su historia se remonta al año 3600 a.C., antes de la llegada de los fenicios.
Es un templo subterráneo, único en la isla. Primero fue usado como santuario de culto para diferentes deidades, después pasó a ser un cementerio de tres niveles, a más de 10 metros de profundidad.
Esta es una de las atracciones turísticas con mayor demanda en la isla, por lo que será necesario reservar o adquirir los boletos con al menos un mes y medio de antelación.
Los Templos de Tarxien se encuentran a 600 metros, por la calle il Karmnu. Un pequeño recorrido por una de las estructuras prehistóricas mejor conservadas de Europa sin duda siempre será una opción.
Sengela, Vittoriosa y Copiscua
Saliendo de La Valeta, es una opción tomar un dghajsa (barco tradicional de Malta) hacia las 3 ciudades de los alrededores.
Vittoriosa, que es la más cercana, es el primer hogar de los Caballeros de San Juan, mejor conocidos como la Orden de Malta. Aquí se encuentra el Fuerte de San Angelo, el Museo Marítimo de Malta y el Palacio del Inquisidor.
En la calle de Santa Margarita, se llega a Copiscua, la mancha urbana más grande de las tres. La Colegiata de la Inmaculada Concepción es una escala, al igual que las fortificaciones Firenzuola y las Líneas de Santa Margarita.
A 17 minutos caminando por las avenidas San Pablo y Dom Mintoff se llega a Senglea. Aquí el atractivo principal es el malecón y el fuerte de San Miguel, desde donde se pueden sacar fotos increíbles de el Gran Puerto y Vittoriosa.
